La alergia, es una reacción exagerada de nuestro sistema inmunitario al reconocer como extraña una sustancia que es inofensiva para la mayoría de las personas y que se denomina alérgeno.
Una expresión de estas es la rinitis alérgica o fiebre del heno que aunque muy molesta no es, en principio, de gravedad.
Cuando un alérgeno penetra en el organismo de una persona alérgica, su sistema inmunitario actúa produciendo anticuerpos que sensibilizan al sujeto tras la primera exposición y por ello en futuros contactos con la misma sustancia alérgena se generaran los síntomas característicos de la reacción alérgica.
Las causas más frecuentes de rinitis alergica son las producidas por polvo, caspa, ácaros y sobre todo por pólenes, pero también se producen por determinados alimentos, medicamentos, picaduras de insectos…
Los tipos de plantas que pueden desencadenar una rinitis alérgica varían según las personas y de las zonas donde crecen las plantas.
En lugares o días secos y calientes con un poco de viento la cantidad de polen en el aire es mucho mayor que en zonas o días frios y húmedos.
Las rinitis alérgicas presentan una serie de síntomas tales como lagrimeo ,escozor, enrojecimiento de ojos, además de picor de la nariz, estornudos, secreción nasal, de fácil reconocimiento por un paciente que ya ha sido diagnosticado una primera vez por un médico.
No olvidéis que lo más importante es PREVENIR y para ello hemos de evitar el contacto con el alérgeno, siempre que sea posible. Consulta los mapas de polen en la ASOCIACION VALENCIANA DE ALERGOLOGIA E INMUNOLOGIA (AVAIC) o en el tiempo.
Pregunta y contrasta siempre la información con los profesionales de la salud.